El vecino de una cercana ciudad a esta cárcel, un carpintero profesional, quien, habiendo tomado conocimiento de la existencia de nuestro espacio, se acercó a Cooperativa de Trabajo Liberté, con el propósito de aportar desde sus conocimientos y contactos, a elevar mediante la capacitación y llegada de nuevas herramientas, la tarea diaria de nuestra carpintería, y a la vez ayudar a producir con una determinada clientela.

Se llama Gerónimo Aguirre y dice que no todo el mundo es lo mismo, ni el que está detenido, ni el policía, médico, juez, cada persona, continúa expresando, tiene buenas o malas intenciones y acá hay gente mucha gente que desea producir, progresar, no solo aprender un oficio, sino también de ser útiles a la sociedad, así que porque no darles una mano, dijo nuestro visitante.

Tras haber recorrido las instalaciones de nuestro espacio dijo que le pareció algo increíble, y pasó a describir la quinta, el restaurante, la rotisería, está todo super organizado, y agregó que tuvo suerte porque la parte de carpintería es lo que falta armar, en clara alusión a que es por lo que vino a poner el hombro, porque el resto de las secciones esta bien planificado y eso lo entusiasma, sonríe, como quien está complacido de lo que vió y promete volver lo antes posible.

Sin dudas Liberté con sus logros y el esfuerzo diario de sus componentes, al paso de sus visitantes, logra desprender no sólo el deseo de volver, ya que siempre habrá algo nuevo para mostrar, sino también de colaborar, de apoyar e impulsar el permanente crecimiento de nuestra cooperativa, cien por ciento autogestionada por presos.

Fuente: Prensa Liberté